El Padre Pío, conocido también como San Pío de Pietrelcina nació en esa localidad en una familia humilde, fue Sacerdote Capuchino y durante su vida sufrió cinco estigmas en todo el cuerpo, que corresponden a las cinco heridas que tuvo Jesús en la Cruz. Le sangraron durante medio siglo, pero nunca enfermó de anemia. Se ha comprobado que Pío tuvo la capacidad de estar en dos sitios al mismo tiempo, que podía realizar milagros y que era clarividente.
Cada vez que un fiel se acercaba a Padre Pío para pedir ayuda y consejos espirituales por alguna necesidad o urgencia por la que estaban pasando él siempre les repetía sin descanso: “Tengamos la firme esperanza de ser escuchados, confiados en la promesa que nos hace el Divino Maestro: Pedid y se os dará; buscad y hallaréis; llamad y se os abrirá… Porque todo lo que pidáis al Padre en mi nombre os será dado”
Si tienes una urgencia, no lo dudes, llénate de esperanza y pide a nuestro Señor por intercesión de Padre Pío.
Oración al Padre Pío para pedir su intercesión
Oh Dios, que a San Pío de Pietrelcina ,
sacerdote capuchino, le has concedido
el insigne privilegio de participar, de modo admirable,
de la pasión de tu Hijo: concédeme, por su intercesión,
la gracia de (PIDA AQUÍ LA GRACIA QUE DESEE ALCANZAR)
que ardientemente deseo y otórgame, sobre todo,
que yo me conforme a la muerte de Jesús
para alcanzar después la gloria de la resurrección.
Gloria al Padre al Hijo y al Espíritu Santo, como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amen. (3 veces)